domingo, 25 de febrero de 2018

NACEMOS PARA MORIR






Nacemos para morir
y cada día morimos un poco.

Morimos de a poco, a pedazos
agonizamos lento como un sollozo,
que muere en nuestra garganta
cuando una pena, una queja,
se clava en nuestra alma.

Nacemos para morir
y cada día morimos un poco.

Cuando el desamor nos rasga,
cuando el dedo se cuela en la llaga.

Morimos lento muy lento,
sin explicación,
ya no hay dolor.

Morimos cuando nuestros labios no fueron besados,
cuando nuestro cuerpo no fue amado,
cuando no escuchamos: Te amo.

Nacemos para morir
y cada día morimos un poco.
Cansados de amar, sin ser amados;
 de buscar y no encontrar,
de cada día morir de a poco.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Vistas a la página totales